Soluciones solares sostenibles para combatir el cambio climático
El 24 de octubre se celebra el Día Internacional contra el Cambio Climático, una fecha que busca concienciar a la sociedad sobre la necesidad de tomar medidas urgentes para frenar el calentamiento global y sus consecuencias. Este fenómeno, causado principalmente por las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de la actividad humana, tiene un impacto negativo en todos los ámbitos de la vida, incluido el sector de la seguridad.
El cambio climático es un problema global que nos afecta a todos y que requiere de nuestra implicación y compromiso. El sector de la seguridad no es ajeno a esta realidad. Por lo tanto, también tiene oportunidad de contribuir a la mitigación y la adaptación al cambio climático mediante el uso de soluciones sostenibles basadas en la energía solar. De esta forma, se puede garantizar la seguridad de las personas y los bienes, al mismo tiempo que se respeta el medio ambiente y se fomenta el desarrollo sostenible.
Videocámaras CCTV: ¿Conexión a red o energía solar?
Uno de los aspectos más relevantes en este sentido es el consumo energético asociado al funcionamiento de los sistemas de seguridad, especialmente los que se basan en tecnologías como las videocámaras CCTV conectadas a red. Estos dispositivos requieren una gran cantidad de electricidad para operar, lo que supone un incremento de las emisiones de CO2 y una mayor dependencia de fuentes de energía no renovables.
Según un estudio realizado por la consultora Memoori, el consumo medio anual de una videocámara CCTV conectada a red es de unos 15 kWh, lo que equivale a unos 7 kg de CO2 emitidas a la atmósfera. Si tenemos en cuenta que en el mundo hay unos 770 millones de cámaras CCTV instaladas, el consumo total anual sería de unos 11.550 GWh y las emisiones totales serían de unos 5,4 millones de toneladas de CO2.
En cambio, si se utilizan cámaras con energía solar, el consumo y las emisiones se reducen drásticamente. Estas cámaras funcionan con baterías recargables mediante paneles solares, lo que les permite operar sin conexión a la red eléctrica y aprovechar una fuente de energía limpia e inagotable. El consumo medio anual de una cámara con energía solar es de unos 3 kWh, lo que equivale a unas 1,4 kg de CO2 emitidas a la atmósfera. Si todas las cámaras CCTV del mundo fueran solares, el consumo total anual sería de unos 2.310 GWh y las emisiones totales serían de unos 1 millón de toneladas de CO2.
Soluciones sostenibles en el sector de la seguridad
La utilización de cámaras con energía solar es una de las soluciones sostenibles que se pueden implementar en el sector de la seguridad para reducir el impacto ambiental y contribuir a la lucha contra el cambio climático. Estas cámaras ofrecen varias ventajas frente a las convencionales, como:
Ahorro
Al no depender de la red eléctrica, se evitan los costes asociados al consumo y al mantenimiento.
Flexibilidad
Al ser inalámbricas, se pueden instalar en cualquier lugar sin necesidad de cableado ni infraestructura adicional.
Fiabilidad
Al contar con baterías recargables, se garantiza su funcionamiento continuo incluso en caso de corte o fallo del suministro eléctrico.
Seguridad
Al estar dotadas de sistemas inteligentes, se pueden controlar y monitorizar remotamente desde dispositivos móviles o plataformas web.
Además de las cámaras con energía solar, existen otras soluciones sostenibles en el sector de la seguridad. Estas se basan en el uso de placas solares para alimentar los propios sistemas o para generar electricidad para todos los dispositivos del mismo edificio o vivienda. De esta forma, se puede lograr una mayor eficiencia energética y una menor huella de carbono.
Soluciones solares sostenibles
En el mercado existen diferentes opciones de cámaras y otros dispositivos con placas solares que se adaptan a las necesidades y características de cada proyecto de seguridad. Algunos ejemplos son:
Cámara PTZ Solar 4G 100% Autónoma
Es una cámara de seguridad que funciona con una batería recargable mediante un panel solar y que se conecta a la red 4G para transmitir las imágenes. Tiene una resolución de 1080p, un ángulo de visión de 120º, un sensor de movimiento, una visión nocturna y un micrófono integrado. Se puede controlar desde una aplicación móvil o una plataforma web. Es ideal para zonas remotas o sin acceso a la red eléctrica o a internet.
Sistema de energía solar integrado
Este producto es una solución solar para alimentar cámaras CCTV de forma autónoma y ecológica. Consiste en un panel solar, una batería, un regulador y un soporte. El panel solar convierte la energía del sol en electricidad, que se almacena en la batería. El regulador controla el voltaje y la corriente de salida para evitar sobrecargas o descargas excesivas. El soporte permite fijar el panel solar en un ángulo óptimo para captar la mayor cantidad de luz posible. Este producto es ideal para zonas remotas o sin acceso a la red eléctrica, donde se requiere una vigilancia continua y eficiente.
Cámara de red con ángulo de visión de 4K, 8 MP y 180°
La cámara MC-2023-180-4G es un dispositivo de video IP que permite la vigilancia remota de cualquier lugar. Una de sus características más destacadas es su batería solar, que le proporciona una autonomía de hasta 10 días sin necesidad de conexión a la red eléctrica. La batería solar también reduce el impacto ambiental y el consumo energético de la cámara, lo que la convierte en una opción ecológica y eficiente. La cámara cuenta con un zoom óptico de 18x, una resolución de 2 megapíxeles y un ángulo de visión de 180 grados, lo que le permite captar imágenes claras y detalladas de amplias zonas.
